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PERTE

Zabala Innovation acompaña al 60% de los proyectos aprobados en la línea 4 del PERTE de Descarbonización Industrial

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Tres de las cinco iniciativas aprobadas provisionalmente en la línea 4 del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de Descarbonización Industrial han sido acompañadas por Zabala Innovation. Este dato supone que el 60% de los proyectos seleccionados han contado con esta consultora especializada en ayudas públicas para inversiones empresariales o proyectos de I+D+i. En términos económicos, el impacto es aún mayor: más del 80% de los 90 millones de euros en forma de subvención adjudicados en esta convocatoria será destinado a proyectos en los que Zabala Innovation ha trabajado junto a sus clientes industriales.

“Lo que más valoran las empresas es que les ayudamos a encajar sus proyectos reales en un marco competitivo como el que exige este tipo de convocatorias”, explica Sancho Ubani, consultor senior de Zabala Innovation, experto en esta iniciativa. “Detrás de estos resultados hay un trabajo muy intenso de alineación técnica y estratégica con los requisitos del PERTE de Descarbonización Industrial”, añade.

La convocatoria de la línea 4, que cerró el pasado 26 de septiembre, se dirigía a proyectos de descarbonización industrial de gran escala que incluyeran la puesta en funcionamiento de una nueva planta de producción industrial o una nueva línea de producción completa, altamente eficiente y descarbonizada. Esta línea concreta estaba enfocada en iniciativas que no solo aspiraran a reducir emisiones, sino que lo hicieran mediante inversiones tecnológicas con un alto grado de innovación. Entre las actuaciones elegibles figuraban la sustitución de combustibles fósiles por energías renovables, la implementación de medidas de eficiencia energética o la captura de carbono dentro de los procesos productivos.

Para optar a estas ayudas, las empresas debían demostrar al menos tres años de experiencia en actividades industriales comparables y presentar proyectos que garantizasen una reducción mínima de 5.000 toneladas anuales de CO₂ equivalente. Además, el presupuesto financiable de cada proyecto debía superar los 10 millones de euros, lo que limitaba el acceso a compañías con cierta envergadura operativa y solvencia técnica.

“La barrera de entrada es alta. No solo por los requisitos técnicos, sino por la necesidad de justificar de forma detallada cómo cada euro contribuye al objetivo de descarbonizar la industria”, subraya Ubani. “Ese es precisamente el valor añadido de una consultora como Zabala Innovation: saber interpretar correctamente la lógica de la convocatoria y trasladarla a una propuesta viable y competitiva”.

Estructura y financiación

Las propuestas presentadas debían estructurarse como proyectos tractores —conformados por uno o varios proyectos primarios— y optar a diferentes líneas de actuación. Era obligatorio incluir, al menos, un proyecto primario dentro de la línea de inversiones destinadas a la Descarbonización Industrial con carácter innovador. También se contemplaban actuaciones en eficiencia energética, promoción del autoconsumo renovable o estudios medioambientales complementarios.

En cuanto a la financiación, las ayudas podían adoptar la forma de subvención directa, préstamo reembolsable o una combinación de ambas. El límite máximo fijado por el Ministerio de Industria establecía que la ayuda total no podía superar el 80% del presupuesto elegible. Los porcentajes variaban según el tipo de actuación y el tamaño de la empresa: en el caso de las pequeñas empresas, por ejemplo, la intensidad de ayuda para proyectos de descarbonización podía llegar hasta el 60%, frente al 40% máximo para grandes compañías, pudiendo verse incrementadas estas intensidades en función de la zona en la que se ejecute el proyecto, o si el proyecto tractor logra emisiones directas de gases de efecto invernadero nulas, incluyendo las emisiones de proceso.

El periodo de ejecución abarca hasta el 31 de marzo de 2026, lo que ofrece un estrecho margen para desplegar inversiones de esta envergadura. Esta ventana temporal tan reducida ha sido clave para que algunas compañías no se animaran a concurrir y estén pensando en las futuras convocatorias que saldrán este año. “Muchas veces las empresas quieren descarbonizar sus procesos, pero no pueden hacerlo a corto plazo sin una planificación seria. Estas ayudas permiten precisamente eso: estructurar el cambio”, argumenta Ubani.

La resolución definitiva de la convocatoria se espera para los próximos meses, aunque los resultados obtenidos por Zabala Innovation en esta convocatoria ya confirman una vez más su posición como uno de los actores más relevantes en el ámbito de la financiación pública de proyectos de innovación y sostenibilidad industrial.

A lo largo del segundo semestre de este año, además, se prevé que SEPIDES coja el relevo del  Ministerio de Industria y publique dos nuevas convocatorias de este PERTE dotadas en conjunto con 1.470 millones de euros, de los que la Línea 1 tendrá 370 millones de euros en subvenciones y 1.000 millones de euros en préstamos, y la Línea 4, 60 millones y 40 millones de euros, respectivamente. “Sin lugar a duda, serán una excelente nueva oportunidad para financiar proyectos orientados hacia una industria limpia y sostenible medioambientalmente, que ofrecerán, además, plazos de ejecución más amplios, concretamente hasta 2028”, concluye Ubani.