Una convocatoria de 750 millones de euros para la cadena de valor de las renovables

El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) lanza este miércoles una convocatoria de ayudas destinada a proyectos que refuercen la cadena de valor de equipos esenciales para la transición hacia una economía de cero emisiones netas. Este programa, enmarcado dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), cuenta con una dotación inicial de 750 millones de euros, procedentes de los fondos europeos Next Generation EU. El plazo para la presentación de solicitudes se extenderá hasta el 6 de noviembre de 2024. Las ayudas se otorgarán en régimen de concurrencia competitiva, lo que implica que los proyectos serán evaluados en comparación con otros solicitantes, y se seleccionarán aquellos que mejor se ajusten a los criterios establecidos.

“El lanzamiento de esta convocatoria responde a la necesidad de reforzar el ecosistema industrial español en un contexto de transformación energética a nivel global”, subraya José Luis Fernández de Piérola, consultor senior de Zabala Innovation en Proyectos Nacionales. Esta línea de ayudas se dirige a iniciativas centradas en reforzar la cadena de valor de los equipos relacionados con energías renovables, y está diseñada para cubrir una amplia gama de sectores clave en la transición energética. Entre los proyectos subvencionables se incluyen aquellos que impulsen la fabricación de baterías, paneles solares, turbinas eólicas, bombas de calor y electrolizadores. También se considerarán subvencionables los proyectos enfocados en la producción de componentes esenciales para estos equipos, utilizados principalmente como insumos directos en su fabricación.

Líneas de actuación

Los equipos y componentes esenciales objeto de subvención se enmarcarán en las siguientes líneas de actuación:

• Almacenamiento eléctrico. Proyectos que involucren la fabricación y ensamblaje de baterías, celdas de baterías y paquetes de baterías (battery packs). Cabe destacar que las baterías para uso en movilidad eléctrica no están incluidas en esta categoría.
• Energía solar fotovoltaica. Se apoyarán las iniciativas que promuevan la fabricación y ensamblaje de paneles solares.
• Energía eólica. Proyectos que fomenten la fabricación y ensamblaje de turbinas eólicas serán considerados para la concesión de estas ayudas.
• Bombas de calor. Esta línea está orientada a proyectos relacionados con la fabricación y ensamblaje de bombas de calor.
• Hidrógeno renovable. Se subvencionarán proyectos enfocados en la fabricación y ensamblaje de electrolizadores, clave para el desarrollo del hidrógeno como fuente de energía.

Los beneficiarios de las ayudas podrán optar a financiar tanto la creación de nuevos centros industriales como la ampliación de los ya existentes, siempre que el objetivo sea la fabricación de estos equipos y sus componentes esenciales. Asimismo, se contemplan ayudas para la reconversión de líneas de producción existentes que se destinen a la fabricación de equipos o componentes que no estaban previamente en producción en la planta.

Financiación e intensidad de las ayudas

El presupuesto asignado para cada actuación se divide en dos programas de incentivos. El primero abarca proyectos con un presupuesto superior a un millón de euros e inferior a 30 millones de euros, mientras que el segundo se dirige a iniciativas cuyo presupuesto sea igual o superior a los 30 millones de euros.

Las empresas interesadas deberán detallar en su solicitud el plan de inversiones y el plazo previsto para la ejecución de las actuaciones. En cuanto al periodo para llevar a cabo las inversiones subvencionables, este podrá extenderse hasta un máximo de 48 meses desde la fecha en que se resuelva la concesión de la ayuda. El plazo de justificación de las actuaciones, por su parte, será de tres meses a partir de la finalización del periodo de ejecución.

El marco de financiación de estas ayudas sigue las directrices del Marco Temporal de Crisis y Transición, que establece diferentes intensidades de ayuda en función de las zonas en las que se localicen las inversiones, de acuerdo con el mapa de ayudas regionales vigente en España. De esta forma, las intensidades de ayuda variarán entre el 15% y el 35% de los gastos subvencionables, dependiendo de la región en la que se realicen las inversiones. En el caso de las zonas C, el porcentaje máximo de ayuda será del 20%, mientras que en las zonas A podrá alcanzar el 35%. La ayuda máxima otorgada será de 150 millones de euros para proyectos en zonas generales, 200 millones en zonas C y 350 millones en zonas A.

Para las pymes, además, se contemplan incrementos en la intensidad de las ayudas: un 20% adicional para las pequeñas empresas y un 10% más para las medianas. Estas bonificaciones buscan fomentar la participación de las pymes en la cadena de valor industrial relacionada con las energías renovables, contribuyendo así a su consolidación y crecimiento.