Las bonificaciones en la cotización a la Seguridad Social por personal investigador, que durante años no estuvieron operativas, han vuelto para quedarse. Y ojo porque, a pesar de su gran potencial tractor de la I+D+i empresarial, es uno de los incentivos fiscales menos conocidos: muchas empresas desconocen que las bonificaciones en la cotización a la Seguridad Social del Personal Investigador suponen nada menos que el 40% en la aportación empresarial a la Seguridad Social.
¿Cómo aprovechar este incentivo?
Utilizar este incentivo no es complicado, pero sí es necesario planificarlo: de forma anticipada, las empresas deben hacer una selección del personal que se dedica en exclusiva o casi-exclusiva a actividades de I+D+i y modificar una serie de claves en el sistema red de la Seguridad Social.
Si la empresa quiere beneficiarse para menos de diez empleados, no será necesario presentar ninguna información ante ningún organismo, pero se considera conveniente tener recogida la actividad de las personas bonificadas en un documento.
En cambio, para las empresas que quieran aplicar este incentivo a diez o más empleados, será obligatoria la presentación ante la Tesorería General de la Seguridad Social de un Informe Motivado emitido por el Ministerio de Economía y Empresa, relativo al cumplimiento en dicho período de la condición de personal investigador con dedicación exclusiva a actividades de I+D+i e innovación tecnológica. De ahí la importancia de tener un Informe Motivado Vinculante.
La ventaja de ser ‘pyme innovadora’
Pero dentro de todas las empresas, las más beneficiadas son las PYMES INNOVADORAS, pymes que hacen una actividad intensiva en I+D+i y poseen un sello que lo reconoce. Los beneficios para las empresas con sello de Pyme Innovadora son múltiples: se evitan tener que elegir entre deducirse fiscalmente por esa persona asociada a actividades de I+D+i o bonificarse por personal investigador en la cuota empresarial de la cotización a la Seguridad Social. Si dispones del sello, ambas cuestiones son compatibles para una misma persona. Otro beneficio, por ejemplo, está asociado a ciertas convocatorias regionales de apoyo a la I+D+i: en la valoración de un proyecto que aspira a obtener una ayuda, el disponer de este sello puntúa en positivo porque, de partida, es un claro aval de la capacidad innovadora de la empresa.
Desde ZABALA llevamos trabajando en este incentivo desde su entrada en vigor y por ello insistimos en sus beneficios, siendo un incentivo de fácil implicación y que da un retorno inmediato a las actividades realizadas de I+D+i y en una forma más intensa a las pymes.