Ir a noticias

PRTR

El ‘data lake’ sanitario, la revolución digital para la salud

'data lake' sanitario

La salud digital da un paso al frente en España con el proyecto de crear un enorme ‘data lake’ sanitario. Es decir, un repositorio de almacenamiento de datos anónimos en bruto y de manera virtual, que pueden ser utilizados para mejorar la atención sanitaria. De esta manera, esta información puede ser procesada con herramientas de ‘big data’ para obtener datos válidos de forma casi inmediata con el fin de adoptar decisiones sanitarias.

Este enorme lago de datos virtual no es una quimera, ya que sale reflejado en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Económica (PRTR). Esta hoja de ruta surgió en 2021 para reconstruir y transformar la economía española tras la pandemia de la Covid 19.

Concretamente se plasma en el componente 18 del PRTR sobre la Renovación y ampliación de las capacidades del Sistema Nacional de Salud. Presenta seis inversiones por un coste de 1.069 millones de euros, y una de ellas es este lago de datos sanitarios, con una inversión prevista de 100 millones de euros que serían gestionados por el Ministerio de Sanidad y el Ministerio de Asuntos Económicos y Digitalización.

Y al estar transferidas las competencias sanitarias a las comunidades autónomas, el gran desafío de este futuro almacén informativo virtual es coordinar los datos de los centros de salud de cada una de ellas.

Las oportunidades del ‘data lake’ sanitario

Las empresas tecnológicas, los proveedores sanitarios, los centros de investigación y las comunidades autónomas ven cómo se abre ante ellas la oportunidad de contribuir a la creación de este ‘data lake’ sanitario, en el que la inteligencia artificial cobra un gran protagonismo. Para implantar este repositorio virtual de información sanitaria será necesario:

  • Adquirir la infraestructura tecnológica necesaria, con el necesario dimensionamiento en seguridad y capacidad.
  • Implementar las plataformas y procesos tecnológicos necesarios para incorporar y explotar la información por parte de cada Consejería de salud participante.
  • Definir y desarrollar el tratamiento masivo de datos, primando las sinergias entre las organizaciones del sector público y el privado.

“Anualmente el Sistema Nacional de Salud, según datos oficiales, atiende 234 millones de consultas médicas de atención primaria, 83 millones de consultas hospitalarias, 4 millones de ingresos hospitalarios y 23 millones de urgencias. Y los datos generados en estas interacciones son una valiosísima fuente de información que actualmente no se está explotando convenientemente. Por un lado porque son datos confidenciales, y por otro porque la gestión es descentralizada a través de las comunidades autónomas”, señala Amaia Brugos, gestora de referencia de los fondos Next Generation EU en Zabala Innovation.

Los objetivos del ‘data lake’ sanitario

Estas inversiones se llevarían a cabo para lograr que esta información sanitaria, que está en bruto y sin ningún tipo de filtro o estructura, se procese para lograr los siguientes objetivos:

  • Proporcionar un análisis masivo con capacidad de respuesta en tiempo real para la identificación y mejora del diagnóstico y tratamiento.
  • Identificar los factores de riesgo y de patrones.
  • Analizar las tendencias relacionadas con la salud.
  • Lograr captar pacientes para ensayos clínicos.
  • Predecir situaciones de riesgo sanitario y programación de recursos para su atención con algoritmos de inteligencia artificial.

“El ‘data lake’ sanitario será clave para potenciar la investigación en la salud pública y medicina personalizada. El reto está en establecer diferentes escenarios de uso de los datos, de forma centralizada pero con la colaboración de las comunidades autónomas y garantizando la confidencialidad. Todo ello utilizando algoritmos de inteligencia artificial, nuevas arquitecturas de sistemas escalables y nuevas herramientas de procesamiento y descubrimiento de modelos. De esta manera, se mejorará la equidad y se reducirán las desigualdades en materia de salud”, concluye Amaia Brugos.