Ir a noticias

Inversión en I+D

Europa acelera en I+D+i, pero sigue rezagada frente a EE UU y China

Investment Scoreboard 2024

En un mundo cada vez más competitivo, donde la investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+i) son motores clave del progreso económico, el EU Industrial R&D Investment Scoreboard 2024 revela una imagen compleja: las empresas europeas aumentan su inversión en I+D, pero todavía enfrentan desafíos significativos frente a sus competidores globales.

“El informe confirma una tendencia que ya venimos observando: Europa está logrando avances en inversión, pero le sigue costando traducir estos esfuerzos en competitividad global”, explica José Alberto de la Parte, director de Proyectos Estratégicos en Zabala Innovation.

En 2023, las 2.000 mayores empresas del mundo invirtieron 1,26 billones de euros en I+D, un aumento del 7,8 % respecto al año anterior. En este escenario, las empresas europeas lograron un incremento del 9,8 %, superando a Estados Unidos (5,9 %) y China (9,6 %). En palabras de De La Parte, sin embargo, “este crecimiento, aunque positivo, no puede ocultar la tendencia a largo plazo: Europa está perdiendo terreno frente a Estados Unidos y China en sectores estratégicos como el software y la salud”.

De las 800 mayores empresas europeas incluidas en el informe, el sector automotriz sigue liderando la inversión en I+D con el 34,2 % del total. Gigantes como Volkswagen, Mercedes-Benz y Stellantis encabezan esta lista. No obstante, De La Parte destaca que “dependemos demasiado de esta industria. Aunque sectores como el de las TIC están creciendo rápidamente, Europa aún está lejos de liderar en tecnologías digitales, donde Estados Unidos invierte casi diez veces más que nosotros en software”.

España: luces y sombras

En el contexto europeo, España tiene un papel modesto pero significativo. En 2023, 11 empresas españolas invirtieron un total de 5.667 millones de euros en I+D. Banco Santander y Amadeus lideran el ranking nacional, con aumentos del 25,7 % y 12,9 %, respectivamente, concentrando casi la mitad del total invertido por las empresas españolas.

“España está haciendo un esfuerzo por ganar peso en el panorama de la innovación, pero seguimos rezagados frente a países como Alemania, Francia o los Países Bajos”, subraya De La Parte. En comparación, Alemania, el líder europeo, cuenta con 233 empresas que invirtieron más de 115.000 millones de euros.

Además, aunque las empresas españolas del grupo principal muestran un fuerte crecimiento en I+D (11,8 %), las emergentes han reducido su inversión, reflejando las dificultades de las pymes para competir en un mercado globalizado.

Competencia global y concentración

Uno de los hallazgos más llamativos del Scoreboard 2024 es la alta concentración de la inversión global en unas pocas empresas y sectores. Las 50 principales compañías del mundo, lideradas por Alphabet, Microsoft y Amazon, representaron el 40,1 % de toda la inversión en I+D. En Europa, solo Volkswagen logró entrar entre los 10 primeros puestos globales, ocupando el quinto lugar con una inversión de 22.000 millones de euros.

“Este nivel de concentración es un desafío para Europa. Necesitamos políticas más ambiciosas que no solo impulsen a las grandes empresas, sino que también ayuden a las pymes a crecer y escalar”, señala De La Parte.

A nivel sectorial, los sectores tecnológicos y de la salud lideran la inversión global. Aun así, mientras Estados Unidos domina en software y biotecnología, China ha multiplicado por ocho su inversión en TIC desde 2013. Europa, por su parte, sigue siendo líder en el sector automotriz, pero no ha logrado diversificar su liderazgo hacia áreas con mayor potencial de crecimiento futuro.

Desafíos estructurales

El informe también advierte sobre una tendencia preocupante: el retorno de la inversión en I+D está disminuyendo en todo el mundo, y Europa es una de las regiones más afectadas. Según el análisis, las empresas europeas necesitan cada vez más recursos para generar resultados tangibles, como nuevos productos o patentes.

“Este es un problema estructural. No se trata solo de gastar más en I+D, sino de gastar mejor. Necesitamos atraer talento, mejorar los procesos de innovación y crear políticas más efectivas que incentiven resultados de alto impacto”, apunta De La Parte.

El informe también destaca el papel de las fusiones y adquisiciones como herramienta para mejorar la competitividad. Las empresas activas en este sentido suelen mostrar mejores resultados en empleo, ventas y rentabilidad. Sin embargo, el impacto en la productividad no siempre es positivo, especialmente en sectores donde Europa ya enfrenta una brecha competitiva.

Una llamada a la acción

De cara al futuro, el Scoreboard subraya la urgencia de que Europa adopte medidas más ambiciosas para mantener su relevancia global en I+D. El contexto político y económico actual, marcado por conflictos regionales y una creciente competencia por la supremacía tecnológica, pone aún más presión sobre la UE.

“El informe deja claro que necesitamos una estrategia de competitividad más amplia y a largo plazo, como sugiere el informe Draghi. No podemos limitarnos a aumentar los presupuestos, sino que debemos fomentar la innovación disruptiva y crear las condiciones para que las empresas puedan escalar a nivel global”, concluye De La Parte.