Eres un pistolero, aunque no demasiado bueno. Bueno, la verdad es que eres bastante malo… Solo aciertas en el blanco el 30% de tus disparos.
Estás en uno de los vértices de un triángulo equilátero, y en el siguiente vértice espera su turno un pistolero con mejor puntería (acierta el 70% de las veces). En el último vértice, el mejor pistolero del mundo (100% de precisión) aguarda impaciente. Porque las reglas son que se dispara por turno un único disparo, tantas rondas como sean precisas hasta que los otros dos pistoleros hayan caído y seas el único superviviente.
La pregunta es sencilla. Tú eres el primero en disparar, ¿qué haces? ¿A quién disparas? El objetivo, como es lógico, es ser el que sobrevive de los tres. O al menos, maximizar las probabilidades de ser el superviviente.
Puedes pensar estas semanas de verano en la solución al enigma. O buscar la solución en Internet, porque es un problema clásico de Teoría de los Juegos. O puedes seguir leyendo y te explico qué tiene que ver este acertijo con la gestión de la innovación y el I+D.
¿Dispararías a los pistoleros?
La solución exige pensar despacio, porque no consiste en disparar a ninguno de los otros dos. Porque, aunque tienes pocas probabilidades, puedes acertar y entonces el superviviente centraría sin ninguna duda su objetivo en ti, y la probabilidad de morir sería muy alta…
Así que es mejor disparar al aire, porque entonces es seguro que en la segunda ronda podrás disparar de nuevo, y ya solo quedará uno de los otros dos… Esta vez sí tienes que apuntarle, y está claro que puedes acertar o fallar, pero si aciertas, quedarás como único superviviente.
¿Por qué ninguno de los otros dos te disparará a ti en la primera ronda? Sencillo, tratarán de acabar con el que tiene mejor puntería primero, y te dejarán a ti para la segunda ronda.
La persona que gestiona la innovación en la empresa, se parece a este pistolero con mala puntería. Aunque no hay ningún área de la empresa que no tenga riesgo de equivocarse, sin duda el área de innovación es la que debe asumir un nivel de incertidumbre o riesgo mayor, por definición.
Está claro que la contabilidad también puede asumir riesgos, pero no es lo que se espera, habitualmente. También puede equivocarse el que selecciona personas, o el que decide qué precio poner a una oferta. En la empresa no hay pistoleros con un 100% de puntería. Pero el que dispara muchas veces en la niebla más espesa, es el que tiene qué decidir las apuestas de I+D.
Por eso, como en el caso del dilema de los tres pistoleros, es bueno pensar despacio. Tener una estrategia de innovación, dedicar tiempo a decidir cómo gestionar el riesgo para no poner en peligro el futuro de la empresa pero, al mismo tiempo, ser lo suficientemente audaz como para abordar proyectos de innovación disruptiva si se da la oportunidad para ello.
También se parece, en que es importante que el área de Innovación conozca cómo funcionan el resto de las áreas, y entienda la estrategia del conjunto. En el juego de la empresa no consiste en matar al resto (aunque a veces uno sienta la tentación…), sino en optimizar el conjunto. Y para eso no basta con pensar desde tu vértice, es bueno hacer un ejercicio de empatía y conocer las estrategias desde todos los vértices….
