Para muchas personas en puestos de dirección en la empresa, la gestión es una actividad ordenada. Consiste en acordar planes con el equipo, establecer objetivos, y después hacer un seguimiento de las tareas que se han previsto para cumplir esos objetivos. Si los indicadores se cumplen, la gestión ha sido correcta.
Está claro que en toda previsión siempre existe un factor de riesgo, pero se entiende que una de las habilidades que debe tener quien ocupa posiciones de gestión es precisamente reducir o acotar esos riesgos, de forma que el plan sea lo más certero posible.
El problema es que hay momentos de crisis en los que la incertidumbre se dispara, y los riesgos se multiplican. Los planes de gestión quedan rodeados de niebla, se desordenan… Este período post-COVID es uno de esos momentos, sin duda.
La gestión de la innovación puede dejar interesantes pistas para la gestión empresarial en estos momentos. Porque la innovación, por su propia definición, es una actividad sometida a niveles de riesgo más elevados que los del resto de ámbitos en la empresa. Así que las personas acostumbradas a gestionar procesos de innovación están acostumbradas a convivir con niveles de incertidumbre más elevados ¿cómo lo hacen?
La innovación, por su propia definición, es una actividad sometida a niveles de riesgo más elevados que los del resto de ámbitos en la empresa
Para muchas personas, la creatividad es la competencia clave que distingue a las personas innovadoras. Sin embargo, para mí, es mucho más relevante la competencia de saber gestionar los riesgos de forma acertada. Es la llave maestra en las estrategias de innovación.
Te dejo cuatro ideas claves que proceden de la gestión de la innovación y que pueden ayudarte a navegar el riesgo y la incertidumbre estos próximos meses, si te interesa podemos conversar más de estos temas. Para acordarte, puedes usar el acrónimo PEPA.
>PEPA: Portfolio · Ecosistema · Público · Adaptación
La primera idea es Portfolio: poner todos los huevos en la misma cesta es un error en tiempos revueltos, hay que plantear proyectos en varias direcciones. Seguir más balones es más cansado, pero ayuda a meter más goles.
La segunda es Ecosistema: trabajar en red ayuda a ampliar la perspectiva y a diluir los riesgos, que se afrontan mejor cuando se trabaja en equipo.
La tercera es Público: en tiempos de crisis lo privado reduce gastos e inversiones, y las políticas públicas, desde Keynes, tratan de hacer lo contrario, ser contracíclicas. Una gestión de los apoyos públicos ayuda a mejorar la eficacia de los recursos privados.
La última A es un clásico: Adaptación o capacidad para adoptar una Estrategia Emergente. Hay que estar listo para adaptar los planes a medida que tenemos más información, no hay que atarse a un plan si el escenario ha cambiado.
Hay más lecciones que aprender en la gestión empresarial que vienen de la gestión de la innovación.
El mes que viene os hablaré de la Teoría de los Juegos ¿conoces el dilema de los tres pistoleros…?